miércoles, 29 de octubre de 2008

El Después

Duele el olvido

y en tus caricias desiertas

me desnudo despacio

pero ya no me ves.

Cierras los ojos del alma

Y lo que te unía a mi se esfuma.

Los besos se duermen en los dedos.

Apago.

En el cielo temible, brillante y redonda,

Nos espera impaciente la dama.

2 comentarios:

Javier dijo...

Hola Pilar:

Darte las gracias por pasar por mi blog. Gracias a ese apartado que tienes en tu blog voy siguiendo tus actualizaciones. Por cierto, he intentado ponerlo yo también, pero no sé cómo. Me gustaría que me informaras. Mi e-mail es javierribas@erabradomin.org
Voy copiando las cosas que me gustan de las diversas blogs.
Por cierto, cuántas afinidades encuentro entre tú y nuestro común amigo Manuel. Tendréis que escribir algo sobre la edad , el corazón y los sentimientos.
Un saludo y sigue, que vas por buen camino.
Javier

Navegante dijo...

He llegado hasta tu primera publicación para conocer lo tuyo mejor.
Escribis muy lindo, esto ya te lo dije, pero generan tus versos cierto hechizo.
Besito, te sigo recorriendo otro poquito.