martes, 1 de diciembre de 2009

Un cuento para Mar

He contestado, por fin, a la llamada de Javier y os traigo un cuentecillo para Mar que hizo esta foto espero que os guste, bueno, espero sobre todo que a ella le guste. Y leedlo con la música que vale la pena



-¡Ssssh, no griteis, ssssh! ¡o no entrará!

-Sí ¡sssh, necesitamos que entre!

Los lenguis esperaban impacientes, escondidos en los rincones oscuros de ese castillo casi derruido.

Todos pensaban que en ese castillo no vivía nadie, pero en realidad ellos vagaban ocultos desde hacía siglos. Sus increíbles grandes ojos recorrían las ventanas y puertas en búsqueda de algún humano que aún crea en la magia. Sus cuerpos brillantes y peludos se frotaban cada noche buscando algo de calor y de esperanza.

Hacía un día de campo estupendo, los padres de Mar habían decidido pasar un día entre las hojas secas del otoño.

Mar y su perra Terra jugaban sin cesar, Mar se sentía protegida al lado de su golden blanca, tan grande y suave.

Hoy Mar era libre para investigar, para recorrer todo el bosque, no había ningún peligro.

Terra corrió, y Mar la siguió a través de los árboles, encontrándose perdida frente al inmenso castillo de piedra.

Los lenguis contuvieron la respiración. Escucharon los pequeños pasos de Mar mientras su curiosa perra les olisqueaba, y de pronto comenzó a ladrar llamando a su ama. Entonces Mar se acercó…

-Venga, salgamos despacio y crucemos los dedos para que no se asuste.

Un paso, otro más, y una bola brillante inundó la habitación. Mar retrocedió sorprendida, pero enseguida se sintió cómoda y calentita, y empezó a distinguir los cuerpecillos peludos y los ojos brillantes de los lenguis. Ellos, felices, la llevaron a su agujero, le contaron sus leyendas, le enseñaron sus brillantes inventos, tomaron batidos de sabores que Mar no conocía, jugaron a juegos a los que nunca había jugado, estaba siendo una tarde muy especial. Una voz adulta retumbó en el castillo, Mar se dio cuenta de que debía irse.

Los lenguis se despidieron sonriendo con los ojos llenos de lágrimas y Mar se marchó feliz sin saber que había hecho realidad algo muy deseado. Cuando llegó a casa Mar metió la mano en el bolsillo, había algo peludo dentro, al sacarlo se dio cuenta de que uno de los pequeños se había colado dentro.

Todo el mundo sabe que las hadas mueren si no se cree en ellas, pero lo que nadie sabe es que los lenguis sólo sobreviven si alguien piensa en ellos, y gracias a Mar seguirían muchos años vivos y brillantes.


17 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusta mucho cielo!! sobre todo como que da con la musica jisjis sigue asi que lo haces perfecto! te quiero muchisimo! Esto siempre me recordara que a nuestros hijos nunca le faltaran cuentos para leer ni historias que contarles.. tenemos una fabrica en casa! Tequero!

Manuel dijo...

Cierto!: no podias haber elegido una música más mágica que la de "Chocolat" para este precioso relato.

Los Lenguis te deben la vida... toda su larga vida.

un beso.

Anónimo dijo...

Ohhh! Piluchi! Qué genial! No sé si me gustas más cuando escribes prosa, cuentos o poesía. Sin duda alguna otra vez me has sorprendido.
Felicidades!

La que quiere otra bolita brillante y calentita en su maleta

Anónimo dijo...

Ese "sino" del principio hay que modificarlo.No se puede publicar en una asociación literaria con faltas de ortografía.Revisa, por favor, antes de publicar.
El Marqués.

Manuel dijo...

Marqués: Pilar no tiene faltas. Quizá prisa, si... Y, en esta asociación, nadie recrimina un error mecanográfico. ¿O quizá has leído alguna entrada de los grandes escritores que la componen, corrigiendola?

¿Tu si lo haces?.

Lo siento por ti, ignorado anónimo: te has perdido la belleza del cuento de Pilar parándote en "una falta de ortografía"...

¡Que pena!. Vas a tener que aprender a leer.

Pilar dijo...

Bueno... me gustaría que la gente que firma en mi blog de la cara, sobre todo si es para esto.
Pero ya ha dicho Manuel todo.
Sólo siento la falta, nadie es perfecto, ha sido un fallo.

Anónimo dijo...

jajaja que facil y gratuito es criticar detras de una pantalla, anonimamente, tirar la piedra y darte la vuelta como si nada... la verdad es los que leemos este blog nos da igual una falta o cien porque nos quedamos solo con lo bueno de lo que escribe no con las tonterias en las que te fijas marques! sigue asi pi, te quiero mucho cielo

Anónimo dijo...

Sigue dañando a la vista y a la memoria de este herido marqués,esa rebundancia de noes con la que empiezas el relato.

Anónimo dijo...

Muy bien marques!!! para criticar hay que saber escribir, si tannto te quejas mirate tus palabras porque tiene mucha gracia REDUNDANCIA es con D, no tengo nada mas que decirte solo que por bocazas has metido la pata. te quiero pi.

Santiago Solano dijo...

Estimada Pilar.

El burro disfrazado de purista que firma como El Marqués, tiene sólo razón en una cosa. Y por eso, si te parece, querida Pilar, vamos a dársela, aunque, por el tono, el modo, y las formas que utiliza, más propias de un hombre iletrado con ganas de herir sensibilidades que de un profesor sensato, no se la merezca. Sí, hay una errata, admitámoslo, no somos perfectos. Nadie lo es, desde luego. Y nosotros, que no somos ni siquiera profesionales en esto de la escribanía, pues más imperfectos todavía. Y sí, somos sólo gente que escribe, aficionados, con nuestros muchos defectos y nuestras muchas virtudes, que también alguna tenemos.
Vamos, si te parece, a corregirla; más que nada para demostrar que somos capaces de rectificar y de aprender, para demostrar que no somos tontos, que estamos en el camino del conocimiento. No como otros que se dedican a ver las pajitas en el ojo del vecino y no derriba de una puta vez las vigas de hormigón armado que le estrechan la visión hasta sólo una mota de polvo, que es lo que te ha ocurrido a ti: que tienes un cuento con una mota de polvo dentro.
Y una vez dicho esto, hemos de decir que no tiene razón cuando, sin pedírselo nadie, corrige, y menos en público, que eso sólo, por sí mismo, ya es una ofensa. O sea que es un “metomeentondo”. Alguien a quien nadie ha dado vela en este entierro y que, nadie sabe por qué vergüenza ajena, viene ahora a darnos la vara.
Tampoco tiene razón cuando afirma que en una asociación literaria no se puede publicar con faltas de ortografía. Sería mejor decir que “no se debe”, porque por poder ya vemos que sí. Y es que en una asociación literaria como la nuestra, en una asociación literaria en la que no se pide título de escritor a nadie – por cierto, ¿en qué universidad dan ese título, que me lo quiero sacar? - lo importante, lo verdaderamente importante, es que escribimos, que nos atrevemos a decir lo que somos y lo que pensamos, que no nos importa llamarnos aprendices, porque, de verdad, sabemos quiénes somos.
Tampoco tiene razón cuando dice “revisa”, así, de tú, imperando, como haciendo de menos a la autora; haciéndote de menos a ti, Pilar, que eres de lo más sincero y bienintencionado en este grupo. Es como si dijera: “yo, desde mi autoridad de Marqués…” Y eso es pura arrogancia. Nada, Pilar, elimina del tufo autoritario de la expresión ese, por favor, pequeño, como de protocolo, que le sigue al verbo revisar.
Reitero lo dicho al principio. Pilar no le des más importancia a las palabras de un burro travestido de purista. Y digo esto de burro porque si fuera tan purista como dice ser, hubiera visto también otras erratas que hay, también muy cerca de ese “sino”. Que uno no puede decir perdón por las erratas en la página tal y tal, y que luego siga habiendo otras imperfecciones. Eso se llama: no tener “puta idea”. Y perdón por las dos putas de este texto, que ellas tampoco tienen culpa.

Un beso.

Anónimo dijo...

Hola Pilar, a las personas que no se atreven a dar la cara no debemos prestarles ni un segundo de nuestro tiempo. Has escrito un cuento precioso y éso es lo importante.

Un besito.

Mila

Anónimo dijo...

Pilarcita, el cuento precioso. Ni caso a "El Marquesito". Ya quisiera él ser la clase de persona que eres tu, sensible, cariñosa y lo mejor... el corazón tan grande que tienes!!!!!
"MARQUÉS" cuidadito con lo que dices de esta persona, que no le llegas ni a la suela del zapato!!!!
Aquí estaró yo para contestarte.

Emilio Porta dijo...

Un cuento para Pilar.

Eráse una vez una escritora que creía en lo que no veía, o mejor, que veía lo que sentía porque era capaz de ver las cosas con la luz de su interior. Vivía en Salamanca pero también en todos sus compañeros de aventura en la Blogsfera. Ella tenía una pequeña bandera invisible en la que se leía una frase: "Quiero llevar la palabra por trinchera"
Trincheras, murallas, fortalezas, destemplanzas...todas esas cosas se rendían ante la espontaneidad e ilusión de la más joven de todos los que formaban Escritores en Red, la de menos acumulación de tiempo medido cronológicamente.
Esa pequeña y gran compañera había escrito un cuento precioso. Un cuento en el que decía cosas como esta:
"Todo el mundo sabe que las hadas mueren si no se cree en ellas." Si, eso es lo que debe saber todo el mundo: las cosas verdaderamente importantes de la vida.
Las palabras que empleamos han ido sufriendo transformaciones en el tiempo. Desde el primer idioma romance hasta ahora, ha habido equis y jotas que se han convertido en ges o al revés, bes que han pasado a uves, han desaparecido y aparecido acentos...es decir, el código ha ido cambiando.
Hubo un tiempo en que no se podia escribir en ordenador la palabra pañuelo, porque en el teclado !no había eñes!...Sí, los escritores debemos intentar ajustarnos a la ortografía, más que nada por estética. Pero los que por estética deberían desaparecer son los aristocrátas que están por encima del bien y del mal. Y lo que no deben desaparecer nunca son tu imaginación y tu alma puestas en las palabras, tu sentido de la bondad y la creencia en la magia.
Porque con errores y erratas se puede vivir. Pero sin magia la existencia sería muy triste. Gracias por traérnosla.
Un beso.

Anónimo dijo...

Burro disfrazado de purista".....señor metemeentodo"..no tener ni puta idea"...perdón a las putas"...
Excelente forma de encajar una crítica en la que no se ofendía a nadie,SINO (ahora sí,Pilar)a una manera de construcción de una frase al inicio de un relato.
Ahora sí que estoy herido,señor Solano porque la autora respondió con más categoria que usted que "lidera" una asociación literaria en la red,para ser leidos,me imagino,no para ser un patio de vecinos que el que se meta con mi prima me va a ver la cara y aquí solo acepto que me digan lo maravilloso que escribo...!!!Y si no le parece bien,recuerde donde está,guarden sus escritos `para sí solos y regodeense pensando que son los mejores,pero mientras sigan publicando en la red,estaran sometidos a la crítica de los que como yo,amantes de la literatura,se sintieron atraidos por una asociación LITERARIA,con tan digno nombre.Aunque si es ese el trato que dá a sus lectores,no volveré a visitar su asociación,pese a perder el gusto de leer a Emilio Porta,Enrique Gracia y algun que otro merecedor del nombre de escritor.Señor Solano,sin imperativos,por favor,creo debe dar ejemplo a sus jovenes pupilas,de como encajar las críticas y no al revés.
El Marqués

Anónimo dijo...

No creo que este sea el sitio para este tipo de discusiones, solo hay que decir que pilar esta empezando y que hay criticas constructivas o destructivas marques. Tu sabras lo que quieres conseguir con tus comentarios, si corregir y animar para que las persones mejoren y lleguen ha escribir cosas de tu agrado o simplemente pasearte por los blogs haciendo comentarios fuera de tono desanimando y provocando a los lectores. Tu tienes la eleccion de el tipo de persona que quieres ser. Te quiero cielo, siempre seras la mejor para mi xD.

Santiago Solano dijo...

Sr. Marqués, no me desdigo en nada de lo que he escrito en esta bitácora. Me refiero al título que le he puesto y que tanto le duele. Y tampoco voy a seguir con una polémica sin sentido. Entienda, esto es punto y final a esta historia. Eso si, quiero comentar algunas erratas ortográficas, animado por su ejemplo, que hay en la respuesta que le suscitan mis palabras. Dichas faltas ortográficas dejan muy claro la altura lingüística de la que usted es dueño y señor. Son las siguientes:

“Categoria” debería llevar un acento. O sea categoría.
“Leidos” debería llevar otro acento. O sea leídos.
“Regodeense” debería llevar otro acento. O sea regodéense.
“estaran” debería llevar otro acento. O sea estarán.
“atraidos” debería llevar otro acento. O sea atraídos.
“dá” debería ir sin acento. O sea da.
“algun” debería llevar otro acento. O sea algún.
“jovenes” debería llevar otro acento. O sea jóvenes.

Y después de esto Sr. Marqués… ya no tengo nada más que decir.

Mari Carmen dijo...

No hagas caso a las lenguas malintencionadas.
Tú lo has dicho, las hadas viven mientras se crea en ellas. Creemos en ti hada de los versos y cuentos. Con tu don nos has otorgado la gracia de saborear este bello cuento.
Mar y Javier te lo agradecerán, yo también.

Un abrazo.